Sé que no somos normales. Yo puedo soportarlo. Y a la vez
deduzco que los demás también pueden. O pueden fingirlo. Las cosas que escribo
tienen un sentido muy lógico para mí. Is et areid sam ed ol euq odeup (leer
desde el final de cada palabra) ¿Dónde está Borges? ¿Dónde está Kafka?
Porque cada vez que ellos escriben se ven perseguidos por los laberintos de sus
soledades. Yo no puedo ser Borges. No quiero ser Kafka. Y todos quieren ser
ellos, y a veces puede que yo también quiera. Pero Tal vez en uno
de esos arrabales perdidos este todo eso que borramos, sin querer, o porque lo
queríamos borrar, o porque otra persona lo hizo por nosotros. Pero seguramente
con el tiempo esta pasión será desafortunada. Porque yo quiero ir a ese lugar,
y recuperar muchas cosas, porque pienso en alguien sensible que
perdió a alguien importante, y porque conjuntamente no existe la libertad.
Quizás en el mundo que nos inventamos estén este tipo de
cosas. En el mundo, hoy por hoy, se hacen muchas preguntas y sé que cada día
me equivoco más, porque todo dura un poco más de lo que debería.
(Si
al lector le apetece puede leer lo que sigue escuchando la canción Asleep, de
The Smiths) Ser yo, ser alguien, ser y quedar. O no ser nada, pero ser especial. Escuchando el sonido del silencio,
porque no queda más nada que perder que lo hemos vivido. Ese momento cuando todo
te maravilla, cuando te duele la sangre y te das cuenta de cosas. Y piensas que
lo que pasa en esta cabeza no se puede curar ¿podre alguna vez alejarme de
esto? Es igual a algo nuevo, te emociona por un tiempo, pero después te aburre
y es igual a todo lo demás. Y yo odio todo lo demás. Busco a los que se ríen con
los ojos y ven cosas, a los que creen en Maktub y aman el arte de los extraños, a
los que abrazan el alma y sienten tristeza al pensar en nada. A esos que saben que algún día van a ser demasiado viejos
para hacer todo aquello que amaban hacer y que también algún día se
olvidarán de todas las cosas que los hacían felices de jóvenes, y de las
personas con las que pasaron sus primeros 18 años de vida. A las
personas que les gusta sentir el viento en la cara. Por todo esto y
mucho más, yo ya no hablo de mi destino. Es mejor cantarle a libertad, aunque
rara vez nos dé signos de vida. A la vez, es lunes, y yo no sé qué tiene que ver la vida
con los lunes. Si las puertas de la
percepción fueran depuradas, todo aparecería ante el hombre tal cual es:
Infinito (Doy a entender que el lector sabe de quién es este fragmento de
poema) ¿Quién eres tú? ¿Estás en contacto con
todas tus oscuras fantasías? ¿Has creado una vida para ti mismo donde eres
libre para experimentarla? (Gracias) Ahora quiero que el que lea
esto piense en ese lugar, donde hay alguien y donde somos alguien, donde
queremos y nos quieren, y las cosas nos maravillan. Es el mejor lugar del mundo.
PD: Nunca van a encontrar lógica en lo que escribo si no les
gusta masticar palabras viejas y usadas.
Penny Lane
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